¿Alguna información? ¿Necesitas contactar al equipo editorial? Envía tus correos electrónicos a [email protected] o ve a nuestro formulario.
consejos y trucos

Descubre los increíbles usos del ajo que seguramente desconocías

Es un ingrediente versátil y multifuncional que ofrece una amplia gama de beneficios para la salud, la cocina y el hogar

El ajo (Allium sativum) es una planta bulbosa perteneciente a la familia de las Liliáceas. Es conocido por sus propiedades curativas y su versatilidad en la cocina. Este pequeño bulbo contiene una gran cantidad de compuestos activos, entre los que se destacan los sulfuros, las vitaminas C y B6, y los minerales como el selenio, el manganeso y el fósforo.

Una de las principales características del ajo es su aroma y sabor intenso, que se debe a la presencia de compuestos azufrados como la alicina. Esta sustancia es responsable de los beneficios para la salud y de las propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias del ajo.

Además, es una fuente rica en antioxidantes, lo que le confiere la capacidad de proteger a las células del organismo contra el daño causado por los radicales libres. Estos compuestos antioxidantes ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, cáncer y otras afecciones.

ajo
Foto: Freepik

Beneficios para la salud del ajo

  • Mejora de la salud cardiovascular: Ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, lo que disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
  • Acción antibacteriana y antifúngica: Posee propiedades antimicrobianas que lo convierten en un aliado efectivo contra infecciones causadas por bacterias, virus y hongos.
  • Efecto antiinflamatorio: Los compuestos del ajo tienen la capacidad de reducir la inflamación en el cuerpo, lo que puede ayudar a aliviar síntomas de enfermedades como la artritis y la gota.
  • Mejora de la función inmunológica: Estimula la producción de células inmunitarias, lo que fortalece el sistema de defensa del organismo y lo ayuda a combatir enfermedades.
  • Reducción del riesgo de cáncer: Algunos estudios sugieren que el consumo regular de ajo puede disminuir la incidencia de ciertos tipos de cáncer, como el de estómago, colon y próstata.

Usos culinarios del ajo

Es un ingrediente indispensable en la cocina de todo el mundo. Sus propiedades aromáticas y su sabor intenso lo convierten en un elemento clave para realzar y potenciar los sabores de los platos. Algunas de las principales aplicaciones culinarias del ajo incluyen:

  • Salsas y aderezos: El ajo se utiliza comúnmente en la preparación de salsas, vinagres, mayonesas y otros aderezos para ensaladas y platos.
  • Platos salados: Es un ingrediente fundamental en la elaboración de sopas, guisos, estofados, carnes, pescados y pastas.
  • Aliños y marinados: El ajo se emplea para sazonar y marinar carnes, pescados y verduras antes de su cocción.
  • Aromatizantes: Se utiliza para perfumar y dar sabor a aceites, mantequillas, panes y otros productos.
  • Postres y dulces: Aunque menos común, el ajo también puede utilizarse en la elaboración de algunos postres, como helados, sorbetes y tartas.
ajo
Foto: Freepik

Remedios caseros con ajo

Más allá de su uso culinario, el ajo también se ha utilizado tradicionalmente en la medicina natural y en la elaboración de remedios caseros. Algunos de los usos medicinales más comunes del ajo incluyen:

  • Tratamiento de infecciones: El ajo posee propiedades antibacterianas, antivirales y antifúngicas que lo convierten en una alternativa natural para combatir infecciones de la piel, respiratorias y del tracto urinario.
  • Alivio de dolores y inflamaciones: Debido a sus propiedades antiinflamatorias, el ajo puede ser útil en el tratamiento de dolores musculares, articulares y de garganta.
  • Mejora de la circulación sanguínea: El consumo de ajo puede ayudar a mejorar la circulación y prevenir problemas cardiovasculares.
  • Refuerzo del sistema inmunológico: El ajo estimula la producción de células inmunitarias, lo que lo convierte en un aliado para fortalecer las defensas del organismo.
  • Tratamiento de picaduras y quemaduras: Aplicar ajo fresco directamente sobre la piel puede aliviar el dolor y la inflamación causada por picaduras de insectos o quemaduras leves.

Estos son solo algunos de los usos medicinales del ajo, que puede ser utilizado de diversas formas, ya sea en infusiones, tinturas, cataplasmas o incluso en forma de suplementos.

Cuidado personal con ajo

Además de sus aplicaciones culinarias y medicinales, el ajo también se ha utilizado tradicionalmente en el cuidado personal y la belleza. Algunas de las formas en las que el ajo puede ser beneficioso en este ámbito son:

  • Cuidado del cabello: El ajo puede ayudar a fortalecer el cabello, estimular el crecimiento y prevenir la caída. Se puede utilizar en mascarillas o en infusiones para el cabello.
  • Cuidado de la piel: El ajo posee propiedades antimicrobianas y antioxidantes que lo convierten en un ingrediente útil para el tratamiento de problemas cutáneos como acné, eczema y verrugas.
  • Higiene bucal: El ajo se ha utilizado tradicionalmente para combatir problemas dentales y de las encías, como la halitosis, la gingivitis y las infecciones.
  • Repelente de insectos: El olor característico del ajo puede actuar como un repelente natural contra mosquitos y otros insectos molestos.
  • Cuidado de las uñas: Aplicar ajo fresco sobre las uñas puede ayudar a combatir infecciones por hongos y mejorar su apariencia.
Foto: Freepik

Usos del ajo en el hogar

Más allá de su uso en la cocina y en el cuidado personal, el ajo también puede ser utilizado en diversas tareas del hogar. Algunas de las aplicaciones más comunes del ajo en el ámbito doméstico incluyen:

  • Limpieza y desinfección: El ajo posee propiedades antimicrobianas que lo convierten en un agente de limpieza y desinfección natural. Puede utilizarse para limpiar y desodorizar superficies, electrodomésticos y textiles.
  • Repelente de plagas: El olor característico del ajo puede ahuyentar a insectos, roedores y otros animales indeseados del hogar.
  • Cuidado de plantas: Aplicar ajo fresco o infusiones de ajo alrededor de las plantas puede ayudar a protegerlas de plagas y enfermedades.
  • Conservación de alimentos: Agregar ajo a los alimentos, como conservas, encurtidos o carnes, puede prolongar su vida útil y evitar el crecimiento de microorganismos.
  • Ambientador natural: Colocar dientes de ajo en diferentes puntos de la casa puede ayudar a neutralizar olores desagradables y purificar el aire.

Consejos para comprar y almacenar ajo

Para aprovechar al máximo las propiedades del ajo, es importante saber cómo seleccionarlo y conservarlo adecuadamente. Aquí te ofrecemos algunos consejos:

Compra de ajo:

  • Busca cabezas de ajo firmes, con los dientes bien compactos y sin brotes.
  • Evita los ajos que presenten manchas, moho o signos de deterioro.
  • Prefiere el ajo de origen local y de temporada, ya que suele ser más fresco y sabroso.

Almacenamiento del ajo:

  • Guarda los bulbos de ajo en un lugar fresco, seco y con buena circulación de aire, como un armario o despensa.
  • Evita exponerlos a la luz directa del sol, ya que puede acelerar su deterioro.
  • Una vez pelados, los dientes de ajo se pueden conservar en el refrigerador, cubiertos con aceite de oliva o agua.
  • También puedes congelar el ajo picado o en rodajas para tenerlo a mano cuando lo necesites.
¿Le resultó útil este artículo?
Artículos Relacionados
MaBe Doval
Últimas entradas de MaBe Doval (ver todo)