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consejos y trucos

Cómo evitar que tu perro destroce la casa: 5 consejos efectivos

Con paciencia y consistencia, podrás crear un entorno seguro y armonioso

Un perro puede ser un compañero leal y amoroso, pero también pueden causar estragos en el hogar si no se les proporciona la atención y el cuidado adecuados. Muchos propietarios de perros se enfrentan al desafío de encontrar formas de evitar que sus mascotas destruyan muebles, puertas, alfombras y otros bienes.

Las razones por las que los perros pueden comportarse de esta manera son variadas. Puede deberse a aburrimiento, ansiedad por separación, falta de entrenamiento o simplemente a la exploración natural de su entorno. Independientemente de la causa, es importante tomar medidas proactivas para prevenir este tipo de comportamiento y mantener un hogar seguro y feliz para todos los miembros de la familia.

¿Cómo prevenir que tu perro destroce la casa?

Proporcionar suficiente ejercicio y estimulación mental

Los perros son animales activos que necesitan una cantidad adecuada de ejercicio físico y estimulación mental para mantener un comportamiento saludable.

Asegúrate de sacar a tu perro a pasear regularmente, ya sea al parque, a la playa o a cualquier otro lugar donde pueda correr y jugar. Además, considera incluir actividades de entrenamiento, juegos de búsqueda y otras formas de enriquecimiento que mantengan a tu perro mentalmente estimulado.

Foto: Freepik

Proporcionar juguetes apropiados y enriquecimiento ambiental

Proporcionar a tu perro juguetes adecuados y un entorno enriquecido puede ser una excelente manera de prevenir que destruya la casa. Ofrécele una variedad de juguetes, como pelotas, cuerdas de tiro, rompecabezas de comida y juguetes de masticación. Además, considera agregar elementos como plataformas de descanso, túneles y otros objetos que estimulen su curiosidad y lo mantengan ocupado.

Establecer límites y reglas claras

Es importante establecer límites y reglas claras para tu perro desde el principio. Decide qué áreas de la casa son accesibles para él y cuáles no, y asegúrate de que tu perro entienda estas reglas a través del entrenamiento y la supervisión. Utiliza barreras físicas, como puertas o vallas, para restringir el acceso a las zonas que quieres proteger.

Entrenamiento de obediencia y refuerzo positivo

El entrenamiento de obediencia es fundamental para ayudar a tu perro a desarrollar un comportamiento apropiado. Enfócate en enseñarle comandos básicos, como “siéntate”, “quédate” y “no”, y recompénsalo con elogios, caricias y premios cuando obedezca. El refuerzo positivo es una técnica efectiva para fomentar un buen comportamiento y evitar que tu perro destruya la casa.

Foto: Freepik

Supervisión y corrección adecuada

Cuando tu perro esté en casa, es importante mantenerlo bajo supervisión. Observa sus comportamientos y, si lo ves intentando destruir algo, intervén de manera apropiada. Puedes distraerlo con un juguete o una orden de entrenamiento, y luego recompensarlo cuando se comporte adecuadamente. Si es necesario, puedes utilizar herramientas de corrección, como collares de adiestramiento, pero siempre de manera responsable y bajo la guía de un entrenador profesional.

¿Qué no hacer cuando tu perro destroza la casa?

Es importante evitar ciertas acciones que pueden empeorar la situación o incluso causar daños psicológicos a tu perro. Algunas cosas que no debes hacer incluyen:

  • Castigar o regañar a tu perro después del hecho. Esto no servirá de nada y puede generar miedo o ansiedad.
  • Dejar a tu perro solo por largos períodos de tiempo sin la debida preparación y entrenamiento.
  • Ignorar las señales de estrés o ansiedad que pueda estar mostrando tu perro.
  • Permitir que tu perro tenga acceso a áreas de la casa que no puede controlar.
Foto: Freepik

Recursos adicionales para evitar que tu perro destroce la casa

Si necesitas más información o ayuda para prevenir que tu perro destruya la casa, existen varios recursos disponibles:

  • Consulta con un entrenador de perros certificado que pueda brindarte asesoramiento personalizado.
  • Busca en línea tutoriales y artículos sobre entrenamiento y modificación de comportamiento canino.
  • Considera la posibilidad de contratar a un paseador de perros o inscribir a tu mascota en un centro de cuidado diurno para perros.
  • Mantente al tanto de las últimas investigaciones y tendencias en el cuidado y el bienestar de los perros.

¿Qué hacer si te muerde un perro y cómo prevenirlo?

Cuando una persona es mordida por un perro, lo primero que debe hacer es mantener la calma. Es importante no entrar en pánico, ya que esto puede empeorar la situación. A continuación, se deben seguir estos pasos:

  • Alejarse del perro: La prioridad es poner distancia entre la víctima y el animal. Si es posible, alejarse del lugar de forma segura y tranquila.
  • Examinar la herida: Inspeccionar cuidadosamente la zona mordida para evaluar la gravedad de la lesión. Determinar si se trata de una mordida superficial, una herida profunda o si hay fracturas o huesos expuestos.
  • Limpiar la herida: Enjuagar la zona afectada con agua y jabón suave para eliminar cualquier suciedad o residuo. Evitar frotar demasiado para no irritar más la piel.
  • Detener el sangrado: Si la herida está sangrando, aplicar presión firmemente con un paño limpio o una gasa estéril hasta que el sangrado se detenga.
  • Cubrir la herida: Una vez detenido el sangrado, cubrir la zona con un vendaje limpio y seco.

Evaluando la gravedad de la mordida y buscando atención médica adecuada

Después de los primeros auxilios, es importante evaluar la gravedad de la mordida y buscar atención médica lo antes posible. Algunas señales que indican la necesidad de atención médica inmediata incluyen:

  • Herida profunda o que sangra abundantemente: Estas lesiones pueden requerir sutura o tratamiento adicional.
  • Fracturas o huesos expuestos: Indica un daño más grave que requiere intervención médica.
  • Signos de infección: Como enrojecimiento, hinchazón, calor o dolor excesivo en la zona.
  • Mordida en áreas sensibles: Como la cara, el cuello o las manos, que pueden tener mayor riesgo de complicaciones.
  • Antecedentes de problemas de salud: Como diabetes, enfermedad cardiovascular o sistema inmunitario debilitado, que aumentan los riesgos.

En caso de que la mordida no parezca grave, pero persiste el sangrado o hay preocupación por una posible infección, también se debe buscar atención médica. Un profesional de la salud podrá evaluar adecuadamente la lesión y brindar el tratamiento apropiado.

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MaBe Doval

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